Historia y Cultura
Son 23 sabores producidos con mucho cariño por las Hermanas Franciscanas del Sagrado Corazón de Jesús
El Convento de Santa Clara do Desterro, en el centro de la ciudad, es el más antiguo monasterio del país, fundado en el siglo. XVII. Como si no bastara su importancia histórica, las Monjas lo convirtieron en un lugar muy típico para visitaciones duranteS las fiestas en junio: uno de los principales puntos de producción de licor de la ciudad, tan tradicional de las fiestas de San Juan.
La costumbre de producir licores vino de Portugal, junto con las Hermanas Clarisas en el año 1670. Luego pasaron la receta para la Congregación de las Hermanas Franciscanas del Sagrado Corazón de Jesús, que actualmente administran el espacio. De acuerdo con la Hermana Aparecida dos Santos, una de las responsables de los licores, cuya producción se realiza a lo largo del año, intensificándose mucho más en el mes de junio.
La tienda del convento se le conoce como Confeitaria São José, y tiene en total 23 sabores a la venta como anís, limón, maracuyá, cacao, pitanga, menta, hinojo(erva-doce), canela, guayaba, carambola, Guaco , cajú y jabuticaba. También producen sequilhos(galletitas artesanales) y dulces de frutas cristalizadas, como el de jenipapo. Incluso, los licores de jenipapo y el de rosas están entre los más vendidos.
“El licor de rosas ya vino con las Hermanas Clarisas. Los primeros sabores fueron jenipapo, mandarina(tangerina), naranja y el de flores (violetas) que hoy ya no lo producimos más. Con el tiempo, las frutas de aquí fueron introducidas, como el cajá, el umbu y la mangaba “, lo explica Hermana Aparecida.
El convento tiene una chacra adjunta, de donde vienen todas las frutas para la producción de los licores. Después de algunas pruebas, nuevos sabores fueron introducidos, como banana y carambola. La rosa usada en la producción es la rosa reina Elizabeth, que también viene de esta pequeña plantación. El licor de rosas, por ejemplo, lleva de 8 meses a 2 años en infusión, siendo filtrado alrededor de siete veces. Cerca de 800 a 1000 litros de licor llegan a ser producidos por año, de los cuales 500 a 600 litros en el período anterior a San Juan.
“El éxito es trabajar con amor y alegría. “Es poner el amor por encima de todo”, dice Hermana Aparecida.
Conociendo la persona detrás de la producción de licor
La Hermana Maria Aparecida y cinco personas trabajan duro para tornarla celebración del San Juan más dulce. Ella es bahiana, del interior de Itamira, en la frontera de Sergipe. Es trilliza, siendo todas las tres hermanas religiosas de la misma Orden de una familia de 17 hermanos. Maria Aparecida, Maria Gorete y Maria de Lourdes ya sabían que querían ser religiosas desde los 10 años de edad.
“Dios nos escogió antes de que naciéramos. Para ser monja tiene que tener vocación. Ser monja es un llamado “, cuenta la Hermana.
La Hermana llegó al convento con 20 años, hoy tiene 53. “Falta un año para mis bodas de plata”, lo revela. Pasó siete años fuera estudiando para ser religiosa y, cuando regresó, pronto asumió la producción del licor.
La Iglesia del Convento de Santa Clara do Desterro
La Iglesia está abierta a los visitantes y católicos el día 19 de cada mes a las 17h. El 19 de julio de 2019 se conmemoran los 304 años de la muerte de Madre Vitória con una Misa solemne celebrada por el Obispo Auxiliar de Salvador, Don Marco Eugênio.
Es importante celebrar la memoria de la Madre Vitória por que hay un proyecto de algunos devotos, de la arquidiócesis y de Don Murilo de llevar su nombre a la canonización. En 2016 Madre Vitória ganó el título de sierva de Dios, denominación dada por la Santa Sé.
Servicio
Lojinha do convento(Tienda) – Confeitaria São José(Confitería)
R. Santa Clara, S/N – Nazaré, Salvador – BA, 40040-450
Funcionamiento: de lunes a sábado de 8h a las 11:30h y de 13:30h a 16:30h. 71 2203-4015 / 71 99681-1711
El valor recaudado con la venta, además de ser revertido para el mantenimiento del proyecto, está orientado hacia un proyecto social realizado por el convento, a través de clases de corte y confección, guitarra, confitería, entre otros. Pueden participar niños y ancianos de ambos sexos.
Te preparamos una lista de las músicas perfectas para esta experiencia. ¡Escúchala ahora!
